...Caigo en mi instinto:

...Caigo en mi instinto:
No lloro, no me lloro. Todo ha de ser así como ha de ser, pero no puedo ver cajones y cajones pasar, pasar, pasar, pasar cada minuto llenos de algo, rellenos de algo, no puedo ver todavía caliente la sangre en los cajones. Gonzalo Rojas, Contra la Muerte

sábado, 17 de septiembre de 2011

La medida de mi luz :

Desde la tierra

Crecí centímetros

desde el centro.


Crecí centímetros de cabeza

y volteé mi rostro esta vez

para sentir caminar mis huesos,

para ver desde allí la forma del pavimento

por donde puedan caminar

mis amantes y mis no amantes,

mis dioses y mis anti-dioses,

mi mente y mi corazón diamante.


Crecí centímetros,

y toqué mi oreja blanda con guantes blancos,

a fuera por donde los vientos me esperan

junto a mis túneles pasados,

junto a la boca de una madre dormida.

Crecí y no crecí a la vez,

pues vivo dormido en un mundo

lleno de abismantes medidas

y de seres no medidos.


Crecí centímetros

Así también mis alas y mi conexión sublime con la tierra,

estoy caminando y volando por todas mis edades,

y sigo creciendo milímetros

creyendo ser la pluma perfecta de un ángel

desvaneciéndose en la plenitud del alma.


Estoy sangrando en medio camino

ocupando la mitad de mi cuerpo y un ojo pensante

y pongo de manifiesto

que no son mi cuerpo ni mi ojo los que crecen centímetros;

Son mi alma y mi mente

los que siguen creando sonidos de sangre

y momentos y paisajes que aún no logro medir,

ni he medido.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Sabes qué es lo más cuático del sueño? que nada se destruyó.