sábado, 26 de octubre de 2019
edén enfermo:
en medio de los buitres
han florecido los verdaderos hambrientos,
los seres deformados en un trono desenfocado,
chocantes —a destiempo— desde templos apolíneos.
flores con cara de angustia
han caído en la batalla de la risa.
el panadero ha incendiado la alameda profunda.
emergen un montón de garrapatas en busca de sus perros.
no hay grieta más negra que la de la angustia
en una parada de bus existencialista,
donde las palabras se quedan atascadas en cuchillos;
donde la tarde se queda atascada entre edificios.
revienta el grito por los vidrios
del habitáculo del hombre
han vuelto a confluir los ríos en las calles
en una búsqueda cosmogónica de los agónicos,
en una búsqueda de las parábolas orgánicas de los árboles.
no hay suficiente espacio para el grito,
un poco más de universo para los desposeídos.
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