...Caigo en mi instinto:

...Caigo en mi instinto:
No lloro, no me lloro. Todo ha de ser así como ha de ser, pero no puedo ver cajones y cajones pasar, pasar, pasar, pasar cada minuto llenos de algo, rellenos de algo, no puedo ver todavía caliente la sangre en los cajones. Gonzalo Rojas, Contra la Muerte

sábado, 29 de noviembre de 2008

HABITACIÓN DURMIENTE:

Desde mi ventana veo mi juventud pasar,
Cristales reflejan las luces y faros alrededor de la luna.

Los ratones desesperados buscan metáforas;
Pero no de alimento,
De protección hacia palabras durmientes.
Mis pies no resisten aquel envejecimiento,
Pero la soledad me toma de la mano,
Son quince los días que resbalan el sudor.
En mi penumbra no hallo más que saladas rocas,
Que hablan de cosas que no me interesan.
Como si resistiera a tanta sal,
Sequedad,
Forestación:
Libertad.

El mártir me impide levantarme,
Que impotencia.
El aluminio de mis pies son fuertes alambres,
Que no me dejan gritar tu nombre,
La larga espera se hace desastrosa,
La mariposas aúllan, y los perros vuelan,
Parece un sueño,
La desesperación corrompe mi habla,
Mis metáforas se vuelven desabridas,
No puedes…
No puedo.
Ni que fuera tan fácil soltar la cuerda,
Caeré, caeré.
Vuelve, vuelve.
Vuelve cuan rápido seas,
La miel esta seca, dura,
Y mis alas no resisten el suelo de un árbol durmiente.
De unas hojas tan débiles como lo son mis pies.